La Casa Blanca levantó esta semana algunas sanciones a Cuba y Venezuela. La posición de la Administración demócrata hacia los dictadores de América Latina se basa en una agenda política interna, aseguró Guillermo Cueto, exfuncionario de Seguridad Nacional del Gobierno de EEUU. El experto no duda que tras los recientes gestos de condescendencia, el presidente demócrata esté a un paso de invitar a Venezuela y Cuba a la Cumbre de las Américas, evento creado en principio sobre la base del respeto al sistema democrático.
Una serie de decisiones tomadas en las últimas horas por el gobierno de Joe Biden parecen mostrar gestos de simpatía hacia dos de los regímenes más autoritarios de América Latina. Luego de varios años del fracasado deshielo hacia Cuba promovido por el expresidente Barack Obama y de la imposición de sanciones bajo la presidencia de Donald Trump al régimen venezolano, la actual Administración demócrata muestra cada vez más acercamientos hacia La Habana y Caracas.
La Administración demócrata está en un momento complicado y busca una salida. «La clave fundamental y ápice de todo lo que ellos [gobierno de Biden] han estado formulando en los últimos días es parte de una agenda que indica la necesidad de hacer una serie de reformas y pronunciamientos que favorezcan a su política interior en cuanto al electorado. Aparte de una agenda que Biden y el Partido Demócrata tienen, sobre todo el ala más izquierdista y liberal».