General Motors y Samsung SDI de Corea del Sur planean invertir más de $ 3 mil millones en la construcción de una nueva planta de celdas de baterías para vehículos eléctricos en los Estados Unidos, dijeron las compañías el martes. Planean operar conjuntamente la fábrica, que se espera produzca celdas prismáticas y cilíndricas ricas en níquel. Las empresas dijeron que se esperaba que creara miles de puestos de trabajo.
El proyecto es la cuarta fábrica conjunta de celdas de batería de GM. Ha anunciado otros tres con LG Energy Solution de Corea del Sur. Una fábrica de 900 trabajadores cerca de Warren, Ohio, está comenzando a construir celdas, mientras que las plantas en Spring Hill, Tennessee y Lansing, Michigan, están en proceso.
El anuncio coincide con una visita a los Estados Unidos del presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol. Los dos países celebran el 70 aniversario de su alianza con una cumbre que también contó con anuncios sobre nuevos esfuerzos de disuasión nuclear, seguridad cibernética y otras áreas de cooperación.
Samsung fue elegido como socio para la cuarta planta después de que se incendiaran algunas baterías Chevrolet Bolt fabricadas por LG, lo que obligó a GM a retirar unos 142.000 vehículos debido a un problema de fabricación de baterías. El retiro le costó a GM alrededor de $ 1.9 mil millones, y el fabricante de automóviles dijo que LG le reembolsó el costo.
“Haremos todo lo posible para proporcionar productos que presenten el más alto nivel de seguridad y calidad producidos con nuestras tecnologías inigualables para ayudar a GM a fortalecer su liderazgo en el mercado de vehículos eléctricos”, dijo el presidente y director ejecutivo de Samsung SDI, Yoon-ho Choi, en un comunicado.
La nueva fábrica tendrá más de 30 gigavatios hora de capacidad y aumentará la capacidad total de celdas de batería de GM en EE. UU. a unos 160 gigavatios hora cuando esté en plena producción, dijeron las compañías.
Los trabajadores de la planta de baterías de Ohio votaron a favor de unirse al sindicato United Auto Workers, que está presionando para organizar las otras fábricas y obtener mejores salarios para los trabajadores. Los funcionarios sindicales han dicho que deben organizar las plantas de baterías para que los trabajadores que fabrican motores y transmisiones tengan un lugar a donde ir cuando se eliminen los trabajos que fabrican vehículos de combustión interna.