Los hechos que desmienten a Kamala Harris: La frontera no es segura

La vicepresidente de EEUU sigue sin reconocer la crisis que registra casi dos millones de cruces irregulares este año. Para ella, la responsabilidad es del expresidente Donald Trump, a pesar de que los números se dispararon con la llegada de Administración Biden. Recientes declaraciones de la vicepresidente de Estados Unidos, Kamala Harris, multiplicaron las ya abundantes críticas contra la administración que lidera junto a Joe Biden, debido a la crisis en la frontera. Sus palabras a la prensa también demuestran que el gobierno demócrata sigue minimizando el aumento descontrolado de los cruces irregulares. Por el contrario, lejos de reconocer los desaciertos, continúa culpando a la pasada administración de Donald Trump por dejar «un sistema de inmigración que no funciona» y que por ende «debe arreglarse».

Sin embargo, no fue tal afirmación la que desencadenó los señalamientos, sino el énfasis en asegurar que la frontera sur estadounidense es «segura». De esta manera de vicepresidente Kamala Harris evita de nuevo hacerse cargo de un problema que empeoró cuando comenzó la Administración Biden. Así lo demuestran las cifras de la Patrulla Fronteriza. A partir de febrero de 2021 los cruces de migrantes irregulares han mostrado un aumento descontrolado.

El exsecretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, es una de las figuras que expresó su preocupación. «Dos millones de inmigrantes ilegales cruzan la frontera y la vicepresidente Harris dice que la frontera es segura. La Administración es peligrosamente incompetente, causando deliberadamente este caos, o ambos. Están poniendo en riesgo a los estadounidenses», escribió en Twitter.

Hay varios hechos que invalidan la aseveración de la funcionaria, designada como «zar fronterizo» para resolver la crisis, y que respaldan a su vez el argumento que expone Pompeo.

Tráfico de drogas

En un solo fin de semana de septiembre, la división de Nogales, Arizona, incautó unas 186.000 pastillas de fentanilo, 3,35 libras (1,5 kilogramos) de polvo de fentanilo, 106 libras (48 kilos) de metanfetamina y cinco libras (2,2 kilos) de cocaína. Los traficantes usaron escondites en luces traseras de vehículos, amarrándolas al cuerpo o dentro de una cavidad corporal, informó el director de la división.

Tan solo en agosto se incautaron más de 3,5 millones de pastillas de fentanilo en Arizona, indicó NewsNation. «Suficiente fentanilo para matar a casi todas las personas que viven en el estado de Connecticut». El hecho de estar incautando esos niveles de drogas solo significa que los carteles están traficando más, afirma el alguacil del condado de Pinal, Mark Lamb. «Es probable que trajeran millones de pastillas que no atrapamos, que no vimos, que ahora circulan entre las comunidades estadounidenses”, dijo.