Buscando proteger a los menores de edad y a que las plataformas cumplan sus propias normas, el Parlamento de Reino Unido está tramitando una ley para sancionar a las redes sociales que no cuiden de sus usuarios. El proyecto ya está en debate y está enfocado en cuidar de los niños, para alejarlos de contenido sexual, violento y que ponga en riesgo su integridad física, a pesar de que las mismas plataformas no lo permitan.
En caso de no acatarse la ley, las empresas de tecnología, como redes o buscadores, entrarán en un proceso legal que les conllevará multas entre 22 millones de dólares o el 10% de su facturación mundial, que por ejemplo, para el caso de Meta serían más de 10.000 millones de dólares. Pero las consecuencias podrían extenderse hasta el bloqueo de estos sitios.
El avance del proyecto también ha incluido la posibilidad de presentar cargos penales contra los jefes de las compañías, entregándoles la responsabilidad de todo el contenido que en esas aplicaciones se publique.
“Nuestro objetivo es hacer que las plataformas de redes sociales rindan cuentas por el contenido dañino, al mismo tiempo que garantizamos que el Reino Unido siga siendo un excelente lugar para invertir y hacer crecer un negocio tecnológico”, afirmó la oficina del Primer Ministro sobre el trámite de esta ley.