El Limón: sus beneficios y múltiples usos

Muchas veces este cítrico forma parte de nuestras vidas sin que lo sepamos. Más allá de sus usos más habituales en la cocina, te contamos en qué productos de consumo diario está presente y qué beneficios aporta a la salud y al cuidado personal.

Hoy nos proponemos hacer una radiografía exhaustiva de esta fruta noble que, debido a su gran versatilidad, nos acompaña de diferentes maneras todos los días. El limón presenta distintos tipos de propiedades en cada una de sus partes y usamos todas.

Seguramente, lo primero que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en el limón es su uso en la cocina, como condimento o ingrediente esencial de infinitos platos, postres y tortas. Pollo al limón, mousse de limón o el clásico lemon pie son sólo algunos ejemplos.

No podemos olvidar, desde luego, el uso de limón en el ritual del té y de otras infusiones (ya sea con su jugo o con su cáscara), así tampoco como su presencia indispensable en infinidad de tragos y cocktails que se preparan en las barras de todo el mundo.

Como vemos, el limón es un ingrediente clave que no puede faltar nunca en nuestras heladeras. Pero además de su uso fresco en gastronomía, ¿en qué otros productos del día a día está presente? Es muy probable que entremos en contacto con el limón cada mañana bien temprano, ya que muchas pastas dentífricas usan su esencia en sus fórmulas.

Un aliado del sistema inmunológico

Al igual que otros cítricos -como las naranjas o los pomelos-, los limones concentran grandes cantidades de vitamina C, un nutriente que ayuda a proteger a las personas contra la mortalidad cardiovascular[1] , sirve para prevenir y tratar la neumonía[2], favorece la absorción del hierro y ayuda a fortalecer el sistema inmune. 

“La principal propiedad del limón es el aporte de vitamina C en la salud: es un nutriente esencial; significa que el organismo no puede fabricarlo y debe ser incorporado con la alimentación”, explica la Licenciada en Nutrición Cristina Maceira. 

El limón también posee carotenoides que tienen grandes beneficios para la salud: son antioxidantes, tienen efectos positivos sobre el sistema inmunitario, promueven la formación de hueso, la salud ocular y disminuyen el riesgo de cáncer[3]. “El limón actúa como potente antioxidante, inhibiendo la formación de radicales libres, responsables del envejecimiento de las células del cuerpo. Evita el envejecimiento de nuestras células y tejidos, mejorando la expectativa y calidad de vida”, dice Maceira.

Además, la presencia de flavonoides funciona como defensa contra la radiación UV y la agresión de patógenos[4]. 

Por último, las pectinas presentes en el limón (se extraen del hollejo, la cáscara y las membranas) contribuyen a un correcto funcionamiento del tracto intestinal, ayudando a prevenir divertículos intestinales y constipación, relacionando su consumo con disminución de la colesterolemia y del riesgo de cáncer colorrectal[5].