Desde su red, Truth Social, el neoyorkino cargó contra la artista, con quien ha tenido ásperos cruces. Al respecto, escribió: “FALLA ÉPICA: Rihanna dio, sin lugar a dudas, el peor espectáculo de medio tiempo en la historia del Super Bowl: esto después de insultar a más de la mitad de nuestra nación, que ya está en grave DECLIVE, con su lenguaje grosero e insultante”. La grosería a la que alude el expresidente es probablemente el hecho que en el año de las últimas elecciones presidenciales, 2020, Rihanna pintó con aerosol un automóvil con el lema «F ** k Trump».
Sin embargo, las críticas a la artista no vinieron solo de la mano del expresidente estadounidense, también incluyó al congresista Ronny Jackson, que fue a su vez médico de la Casa Blanca. A principios de esta semana reclamó: “¿Por qué la NFL está mostrando esta basura? ¡¡Rihanna NO DEBERÍA ser la artista del medio tiempo!!”. Y las críticas de Trump preceden al partido. Dos días antes escribió: “Sin su ‘Estilista’, ella no sería NADA. ¡Todo malo, y SIN TALENTO!”
A un año de las elecciones presidenciales, la disputa entre Trump y Rihanna actualizada en el Super Bowl, deja en claro que la industria del entretenimiento está contra el expresidente. A su vez, le permite a él avivar su discurso frente al hecho que las élites no lo respaldan, sino el ciudadano de a pie que quiere cumplir el sueño americano.