La nueva norma elimina los requisitos de elegibilidad de ingresos que formaban parte de los programas anteriores y permite que cualquier estudiante sea elegible para calificar a estos recursos. En adelante, los alumnos también podrán usar esos fondos para asistir a una escuela privada o una chárter.
El gobernador Ron DeSantis firmó una ley que amplía el programa de bonos escolares a todos los estudiantes en Florida, durante un acto celebrado este lunes en Christopher Columbus High School, en el suroeste de Miami-Dade.
Según la legislación que DeSantis refrendó junto a varios estudiantes, los únicos requisitos para calificar al programa son ser “residentes de este estado” y que los postulantes a estos recursos sean “elegibles para inscribirse desde jardín de infantes hasta el grado 12”.
“Florida es número uno en lo que se refiere a libertad educativa y opciones educativas, y la firma de la ley de hoy representa la mayor expansión de opciones educativas en la historia de estos Estados Unidos”, dijo el gobernador.
La ley incluye un sistema de “prioridad” escalonado para que los estudiantes reciban los cupones. En ese sentido, los estudiantes cuyos ingresos familiares son inferiores al 185% del nivel de pobreza federal, aproximadamente 51.000 dólares para una familia de cuatro, tienen la prioridad número uno.
En otro nivel estarían los estudiantes cuyos ingresos familiares van desde el 185% del nivel de pobreza hasta el 400% de esa escala de medición, lo que equivale a unos 111.000 dólares para una familia de cuatro.
“Cuando se combinan becas privadas, escuelas chárter y programas de elección del distrito, Florida ya tiene 1,3 millones de estudiantes que asisten a la escuela de su elección”, dijo DeSantis. “Estos programas han sido fundamentales para elevar el rendimiento estudiantil durante los últimos veinte años”.